Encodya
- Desarrollador: Chaosmonger Studio
- Plataformas: PC
- Lanzamiento: 26 de Enero de 2021
“Neo Berlín, 2062. Una oscura megalópolis controlada por corporaciones y políticos corruptos. Tina, una huérfana de nueve años, ha hecho de las calles su hogar. Rebusca en los lugares para ganarse la vida, inventando nuevos usos de los restos que encuentra. Su único amigo es S.A.M. 53, un robot grande y torpe que le asignaron al nacer y que hará cualquier cosa con tal de protegerla. Hoy, Tina y Sam, descubrirán algo que puede cambiar su mundo. Un sueño olvidado que los embarcará en un increíble viaje. El viaje a… Encodya”
En el párrafo de nuestra introducción leéis de forma literal las líneas de texto que nos deja la presentación de la primera gran aventura gráfica de este 2021. Y se nos presenta con toda la épica y pasión que tanto nos gustan, gracias a los estonios Chaosmonger Studio y a su punta de lanza Nicola Piovesan.
La aventura arranca con la típica estampa de futuro distópico y su habitual nivel cromático de azules, grises, negros… un mundo de apariencia desangelada donde una niña “decide”, pese a compartir protagonismo con Sam, “comerse” la pantalla al exponer unos rasgos deslumbrantes de valentía, ternura y una vocecilla que encandilaría al más frío del lugar.
Bueno, quizá a Jonas Rumpf no lo conseguiría. El alcalde de Neo Berlín que referencia la viva imagen de un caricaturizado Donald Trump —siendo quizá excesivo el insulto con que se insiste a su figura—, y que gobierna una ciudad que ha vivido una transformación multicultural hasta tal punto que terminó sustituyendo el idioma alemán por el inglés y donde vemos como incluso cualquier rotulación se lee con caracteres hanzi, kanji… con sus inherentes luces de neón.
Una fotografía que se completa con una paridad ciudadana entre robots y humanos, aunque casi sería mejor decir “ciberyonquis”, pues vemos como la sociedad ya está condenada a pasar las horas, los días… la vida, atada a un ciberespacio que, para postre, es la “sala de juegos” de Mr. Rumpf. Eso sí, quizá esta tendencia cultural esté justificada ya que en los primeros paseos vemos que en Neo Berlín está prohibido deambular… (bueno, que no nos asombre tanto, ya que lo vivido este último año se puede llegar a asemejar…)
Hablábamos de Sam, el robot coprotagonista programado para cuidar de la jovencita y al que podemos controlar siempre que queramos, teniendo ciertas facultades de fuerza, altura… que complementan de forma muy realista a Tina. Además, ese factor es clave e igual de orgánico en los puzles que, pese a no ser muy atractivos e incluso algunos pueden presumirse de ideas algo perezosas, son verosímiles, cotidianos y, como es norma, de corte clásico.
Pero lo que sí se aleja de lo tradicional es un conflicto en el que Mr. Rumpf nos seguirá la pista por toda la ciudad, ya que parece ser que Sam esconde un viejo y encriptado secreto en su interior que puede resultar algo “familiar”.
Encodya es una emotiva y notable aventura gráfica… y un enigmático viaje que solo tú debes experimentar. Encodya es sentirte más Sam que el propio Sam, ya que el propósito de Tina será el nuestro, y ayudarla en su cometido será la única prioridad. Encodya es un legado. Legado en un mundo igual de miserable, pero, como dice la propia Tina, con algunas lucecitas de más.