Detective from the Crypt
- Desarrollador: BOV
- Plataformas: PC
- Link Steam: clicka aquí
- Lanzamiento: 17 de Junio de 2021
“Algo malo pasó con nuestra familia. Lo último que recuerdo son las felices caras de mis padres. ¿Por qué me desperté en una cripta? ¿Por qué murieron papá y mamá? No recuerdo el último día de mi vida…”.
Poco más de un año atrás, el estudio BOV nos narró la peculiar historia de Cat and Ghostly Road, y ahora, manteniendo algunos de los mimbres que funcionaron en su primer lanzamiento comercial, nos traslada a la Residencia Darkday donde nos pondrán en la piel de la joven Jane. Aunque, a decir verdad, en la piel… literalmente parece que no. Más bien seremos un bello fantasma con ganas de saber la verdad.
Lord y Lady Darkday, la tía de Jane —Esther—, pasando por la institutriz, George el mayordomo, el apuesto pintor Oscar y, cerrando el tablero, un cazador furtivo algo desaliñado asentado en los alrededores de la mansión.
Especificábamos “tablero” ya que son los protagonistas de la historia y, a su vez, los sospechosos de un crimen donde los residentes de las tumbas son quizá los únicos testigos. Un caso que obviamente no termina con la muerte de Jane, si no que justo acaba de empezar.
En cuanto a las características en las que confía el dúo formado por Olga Yatsuk y Oles Berezhetskiy, son las de una aventura de “scroll” sin profundidad en pantalla que coquetea con los insulsos “hidden objects” pero que, por suerte, conforme avanza la aventura, veremos cómo mejoran levemente sus puzles —maldiciendo siempre los tubos de ensayo–, sumado a la gustosa recompensa de ir tachando tareas, obteniendo pistas y otras escuetas teorías, plasmadas en el bloc de notas de nuestro inventario espectral.
Por lo demás, el desarrollo se esmera —siendo finalmente poco relevante— en implantar funciones como el candelabro o el factor felino, pero manifestándose siempre como herramientas en las que parece no se termina de confiar.
Detective from the Crypt es el enésimo giro de tuerca del mítico Cluedo en forma de aventura gráfica. Una historia bien ambientada que implora giros y sorpresas argumentales. Una angustiosa velada con Jane. Los rescoldos de una reunión familiar. “Yo misma soy un fantasma, pero hablo como si estuviera viva”; quizá no sea mala idea ayudar a Jane a descubrir hacia donde demonios apuntar…