Splittown
- Desarrollador: Mats Kyyrö & Juha Keränen
- Plataformas: PC
- Link Steam: click aquí
- Lanzamiento: 15 de Enero de 2025
No son buenos tiempos. Ni para la región de Palimpsest. Ni para el departamento de operaciones de la IM5. Ni para su laboratorio. Ni para Leonard Nimby. Que haya un atentado contra la sede donde desempeña su trabajo tampoco ayuda. Su autor: un pez gordo y candidato a la alcaldía. Su delito: robar el último artilugio desarrollado por la IM5. Comienza la búsqueda incesante de justicia, redención y muchas respuestas.
Mats Kyyrö y Juha Keränen presentan una de esas aventuras que llaman nuestra atención de inmediato. En un primer vistazo las evidentes inspiraciones gráficas y mecánicas funcionan, la premisa convenciendo mientras todos los ingredientes están dispuestos y preparados en la mesa.
Efervescencia… y disipación. No tardaremos en ver brotar nuestros acalorados porqués al afrontar sucesos y decisiones de guion que nos fruncen el ceño. El desorden entre los nudos de la trama resulta en el ovillo de luces de Navidad que guardaste el año anterior. Los conflictos, tan sensatos como insensatos, aparecen y desaparecen para incredulidad del entusiasta aventurero.
La isla lo sufre por igual. Aun siendo una fotografía relativamente atractiva, resulta difícil creerse la ciudad y sus gentes ya que sentimos pasear por un collage de lugares aleatorios, vacíos e inconexos; cromos de distintas colecciones, con la salvedad y alegría de ver un transcurso día-noche o alguna meritoria animación.
Parte de responsabilidad también para unos personajes clave que no se moverán de la baldosa dónde los vimos por primera vez, y otros que no debieron pintar nada para terminar siendo excesivamente protagonistas, confirman nuestra etapa de negación. Pasamos gran parte de la aventura anhelando, cual perro abandonado; impacientes, cual madre en el patio de butacas de la primera función de su retoño.
En España existían los inventos del TBO, cruzando el gran charco pensarán en el Inspector Gadget y en oriente aún cercamos muchos referentes más. La aventura coloca las fichas en mostrar artefactos y artilugios ideados en el laboratorio de la agencia IM5 que claramente restan valor a un guion de salud quebrada.
Los puzles al rescate. Algunos retos iniciales avalan nuestra fe, si bien la realidad fue más terca esta vez. Nadie disfruta desbloqueando la contraseña del e-mail, el móvil, o cualquier aplicación. Son trámites tan necesarios como aburridos en estos días que, por descontado, no cabían aquí y prácticamente en ninguna aventura. No los merecía Leonard; ni nosotros, se ha de decir.
Conocer a tu público. Los temas musicales de los que disfrutamos en la aventura son de sobrada calidad, sin embargo, a la práctica, poco refuerzan la experiencia si se yerra en los momentos y escenarios en los que resuenan o, a su vez, resultan exageradamente dispares entre sí en cuanto a género o estilo se refiere. Descentran. Como la orquesta clásica que viéramos prepararse para tocar en ese mugriento pub musical.
Splittown es una buena receta que no se ha logrado transformar en placer para degustar. La agonía a varios niveles de Leonard Nimby era consigo suficiente. Sobraba leña para calentar. Nuestro protagonista llevaba implícito el drama, la épica y la atracción para empatizar. Habrá que esperar. Ojalá Mats y Juha sean perseverantes. Leonard lo ha sido, pese a todas las piedras que le pusieron en el camino. Pese a todo, sin más.